miércoles, 21 de noviembre de 2012
Café Caníbal - Parte V (Fin del Capitulo I)
sábado, 3 de marzo de 2012
Cafe Canibal - Parte IV
Pensó durante 20 minutos con su mano bajo el mentón y con su mirada perdida. Cuando reacciono nuevamente, fue para enviarle un correo electrónico a esta chica, diciéndole que el tiene el vídeo y que se lo dará si cumple una sola condición.
Jenny no tardo en responder que no piensa entregar ninguna parte de su cuerpo a cambio de ese vídeo. El, simplemente lanzo una sonrisa malévola y contesto: “No te preocupes, no estoy interesado en carne tan tierna: simplemente te estoy dando la oportunidad de ver, lo que tanto anhelas en vivo”.
La chica respondió, que era española y que por presenciar el acto, seria capaz de viajar a donde sea: pero solo quiere estar con consentimiento de la víctima.
Largo resoplido lanzo el muchacho, parecía que esta cría lo estaba descolocando. Menciono que la víctima lo permitió, y que si realmente quiere estar, que se tome el primer vuelo a chile cuanto antes, porque dentro de dos días iba a ocurrir.
Durante unos minutos reflexiono si lo que había hecho le afectaría. Pero el no planeaba dejarla ir, el quería tener el banquete de su vida. Lo enloquecía su imaginación, estaba al borde de un orgasmo sin fin. Se preguntaba que sucedería cuando estuviese allí, deliraría de placer...
Al otro día despertó nervioso y exaltado, sus pesadillas recurrentes se habían vuelto una tortura, una enfermedad, un horror. Si, ellos no estaban mas en este mundo. Su padre fue muerto en una balacera de mafiosos y su madre, su preciada y amada madre. Esa mujer que dio todo por el. Ah! Como la extrañaba, cuando se recostaba con el y le acariciaba su cabellera, mientras le cantaba cualquier canción que se le cruzara por la cabeza. No importaba si era un desastre musical, su voz lo calmaba y lo amansaba. A veces lloraba por ella, la extrañaba demasiado; pero siempre se terminaba consolando igual. Pensaba que ella estaba en el paraíso, viviendo una hermosa eternidad.
Cuando salio de ese momentáneo pozo depresivo, se vistió con su peor ropa y salio a la calle a buscar gente. Necesitaba contacto humano.
Cuando el sol ilumino su cara una vez que atravesó el portal de su casa, su cabeza comenzó a dolerle. Una puntada muy fuerte inundo su lado izquierdo. Con su mano derecha apretó con intensidad su frente, creyendo que calmaría el dolor. Pero el mismo seguía. Ignorando el malestar continuo avanzando. Cuando alcanzo la esquina, ya se había olvidado y ya pensaba en ir a la plaza de armas.
Cuando llego luego de caminar muchas cuadras. Vio a lo lejos algo que lo inquieto. Si, era ella, ese pelo rojizo y esas curvas. Estaba de espaldas, pero era mas que reconocible. Era Alicia, la difunta Vecina. Aquella que estaba con las tripas al aire.
miércoles, 21 de diciembre de 2011
Cafe Canibal - Parte III
Se levanto tan rápido, que ni siquiera noto cuando tiro un monton de cd's que tenia apilados en el escritorio. Su alegria lo desbordaba cual general luego de ganar una batalla. Se detuvo frente a la radio y la encendió. Subió el volumen de un giro; la musica se sentía desde la otra calle, pero a el no le fastidio. Escucho a Beethoven y su sinfonia numero nueve, cuatro o cinco veces. Miraba cada cinco minutos la pantalla de la computadora, esperando la respuesta de alguien hasta que a los cinco minutos sucedió. Habia un mail de una desconocida en el buzon de entrada. Se apodaba “Carne Fresca”, decia tener veintiséis años, dos mas que el. Comentaba estar interesada en la propuesta, pero no por placer, sino porque cree que su vida es un asco. Ademas adjunto una foto, rogandole que suceda de una vez.
El pobre tipo con excitación abrio la foto y la miro con euforia, pues ella era hermosa. Una chica castania de ojos miel, con un rostro de impresion tersa, no delgada, pero tampoco gorda. Era perfercta.
La deseaba cada vez mas, a cada segundo que miraba esa imagen se ilusionaba con todo lo que podria hacer. Respondio enseguida preguntandole de donde era para poder encontrarse de una vez. Ella no tardo en contestar. Menciono que era boliviana y vivia que en plena capital. Toda la situacion era como vivir en el paraiso. Una chica latina que pedía que el con sus fuertes y masculinas manos, la ayude a terminar con su dolor.
Continuaron la conversacion digital arreglando encontrarse en dos dias frente a la universidad de Chile alli en calle Bella Vista. Su emocion corria con la impaciencia de un ninio, no paraba de ilusionarse y de imaginar las cosas que haria. Frente a tanta desesperación decidió quedarse un poco mas en el ordenador para bajar los nervios. Volvió al foro donde había publicado el mensaje para ver que dirían los demás usuarios. Entre ordinarieses y palabras mal ubicadas hacia su persona, encontró un comentario que le llamo mucho la atención:
“Hola
Yo estoy buscando el video original de Armin Meiwest, me preguntaba si tu sabrias como obtenerlo. Yo trabajo en una tesis, me interesa lo que haces. Si sabes algo del video o te gusta la idea de hablar, pues me gustaria hacerte varias preguntas, espero no te ofendas. Mi correo es: ******@********.com
Espero tu respuesta.
Jenny”
sábado, 10 de diciembre de 2011
Cafe Canibal - Parte II
Sus pasos marcaban un vals perfecto, sus manos marcaban el tempo, era como estar en un concierto de música clásica. El sentía en su cabeza la melodía, esa perfección que perdió hace tanto tiempo, esa perfección que le arrebataron hace años, aquello tan preciado como la vida misma.
Ahora ya no importa, se siente satisfecho en amplios sentidos. Su camisa a cuadros volaba contra el viento resaltando sus colores rojizos frente al ambiente gris. Cuando notó que su remera se veía demasiado, con temor y desaparición la cubrió. Al tender su mano para agarrar la camisa y taparse, se manchó de aquella sustancia que tenia en su remera, aquel fluido rojo y espeso. De una mirada lo vio y suavemente con la lengua lo limpio; su cara se transformo; era el éxtasis, el placer.
Llego a su casa apurado, pero cansado tiro su camisa y su remera en el lavarropas e incendio sus championes negros en la pileta con alcohol. Ese trasto mas negro y carbonizado que antes lo deshecho en la papelera que se ubicaba a la izquierda. Corrió con desesperación a la computadora que tenia sobre su preciado pero manchado escritorio plateado. La encendió y tipeó una dirección www.cafecanibal.com cuando finalizo la carga, se encontraba frente a una web normal, un foro sin nada resaltante. Solo una palabra llamada su excitada atención CANÍBAL. Cuando veía sus letras sentía el éxtasis, su miembro se levantaba con fuerza, su lengua deseaba y recordaba ese sabor. Una oleada de recuerdos inundo su mente, desde su infancia cuando Tommy ese caniche toy que tanto amaba la familia termino desaparecido.
El lo quería mucho al can, pero no lo soporto, lo vio con deseo e imaginación, quería creer que era algo mas que simplemente Tommy; alguien mas. Tomo las patitas traseras del inocente perro y separándolo del suelo lo golpeo contra un tronco del jardín, el animal grito una... dos veces... y simplemente dejo de respirar. Lo abrió con la vieja navaja de papa que andaba tirada al costado de una maceta y mordió su pata, esa carne ese fluido sanguíneo y crudo. Fueron minutos hasta que reacciono frente a tal actitud. Se sentía enfermo, desquiciado. Perdió el control y comenzó a vomitar con desesperación, regurgitando la sangre que había ingerido. Atino a embolsar el cadáver del animal y llevarlo a una papelera publica de la avenida. Lo deposito con cuidado sin que nadie lo viera y salio corriendo desesperado. Era un pequeño de 12 o 13 años común corriendo por plena calle Providencia.
Cuando volvio en si y sus ojos volvieron a su lugar, comenzo a teclear mirando la pantalla:
“Busco: Busco mujer o Hombre, deseo de llevar acabo cosas impensables absoluta discrecion; bromistas abstenerse. Mi correo *******@******.com
No importa la edad, solo mayores de edad.
P/D: Tengo mucha hambre :)
ASD (Invitado)”